Más conocido como vientre por alquiler-, ha avivado el debate político sobre esta práctica ilegal en España.

La reconocida presentadora de televisión acaparó la atención de los medios españoles y de los partidos políticos del país cuando la revista “¡Hola!” publicó una fotografía en su portada de Ana con un bebé en brazos, anunciando que se había convertido en mamá de una niña.

”Las emocionantes imágenes de la felicidad de Ana al salir con su bebé en brazos del hospital de Miami”, dice la portada de la revista “Hola”, acompañada de una fotografía de la artista saliendo del hospital con la bebé en sus brazos.

LA PRIMERA REACCIÓN PÚBLICA DE LA ACTRIZ

“Nos pillaron. Llegó una luz de amor a mi oscuridad. Ya nunca volveré a estar sola. HE VUELTO A VIVIR”, escribió en Instagram Ana Obregón, quien perdió a su hijo Alessandro debido a un cáncer en 2020, cuando tenía 27 años.

La noticia sobre la maternidad subrogada de la actriz estuvo en absoluta reserva durante todo el embarazo. “Solo Ana; sus hermanas, Celia y Amalia, y Alessandro Lequio, el padre de su hijo Aless, sabía que el proceso estaba en marcha”, publica la revista.

Los embarazos subrogados están prohibidos en España, aunque se pueden registrar los hijos de dichos embarazos.

SE CALIENTA EL DEBATE EN ESPAÑA

La noticia desencadenó de inmediato las críticas del gobierno de coalición de izquierda encabezado por los socialistas. La ministra de Igualdad, Irene Montero, de la coalición de izquierda Unidas Podemos, dijo que los embarazos subrogados eran “una forma de violencia contra las mujeres”, mientras que la ministra socialista de Hacienda, María Jesús Montero, describió la práctica como “explotación del cuerpo de una mujer”.

El principal partido conservador de la oposición, el Partido Popular, sorprendió a muchos al anunciar que estaba abierto a debatir la legalización de tales embarazos si no hay pago de por medio.

Además, el portavoz del parlamento del partido socialista, Patxi López, dijo que la legislación debe modificarse para evitar estos casos.

“Hay que darle la vuelta a lo que tenemos ahora para que nadie vaya o quiera ir al extranjero a buscar la forma de contratar a una mujer para tener hijos y no se debe permitir que al llegar a España puedan registrar a sus hijos con total normalidad como si no hubiera pasado absolutamente nada”, dijo López.

Aun así, en España muchas agencias ofrecen sus servicios para proceder a la gestación subrogada en el extranjero. Los paquetes ofertados van desde los 50,000 euros en países del este de Europa a los 100,000 de Estados Unidos o Canadá.

QUÉ ES UN EMBARAZO SUBROGADO

La gestación subrogada, permitida en unos países y prohibida en otros, es objeto de controversia por los conflictos económicos, morales y sociales que implica. Esta práctica consiste en implantar un embrión en una mujer que cede o alquila su útero, y quien después de dar a luz, entrega el bebé. Puede ser altruista, si la mujer que se queda embarazada no obtiene dinero por ello; o lucrativa, cuando existe un pago de por medio.

El procedimiento más habitual utiliza la fecundación in vitro para obtener un embrión que luego es implantado en la mujer que cede o alquila su útero para continuar el embarazo. En este caso pueden darse varias situaciones: que los dos gametos procedan de los padres intencionales, que uno de los progenitores proporcione uno de los gametos y el otro sea de un donante; o que los dos gametos procedan de donantes. También se pueden emplear embriones donados.