¡Síguenos!La aplicación de movilidad Uber no registró alzas en sus tarifas de viajes en la Ciudad de México, pese a los problemas en la distribución de gasolina reportada por algunos capitalinos esta semana.
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El Financiero realizó un sondeo en la aplicación para detectar si los conductores de la aplicación móvil se vieron afectados por la falta de combustible en la capital del país.
Durante la mañana de este miércoles, no se encontró un incremento en las tarifas dinámicas ni falta de conductores de Uber, además de que el tiempo promedio de atención estuvo dentro de entre 2 y 5 minutos.
Un viaje solicitado desde Pico de Tolima a Lorenzo Bouturini, zona en la que se reportó el desabasto de combustible, generó un costo de 133 pesos, valor dentro del rango de Uber, que es de 168 pesos en promedio, y un tiempo de espera de tres minutos.
Desde el mismo punto pero hasta Constituyentes, ubicada en la alcaldía de Miguel Hidalgo, el viaje costaba 123 pesos, cifra dentro del rango estimado dentro de la plataforma de la compañía que es de 144 pesos en promedio a mediodía.
Para arribar a la colonia Jardín Balbuena, ubicada en la alcaldía de Venustiano Carranza, desde Pico de Tolima, la aplicación calculó un gasto de 153 pesos, cantidad dentro del promedio de Uber para esa zona (173 pesos).
Otro punto que se consultó fue la avenida Viaducto en la alcaldía de Iztacalco. Uber estimo un tiempo de llegada de cinco minutos y un costo de 158 pesos, cuando el margen de la aplicación para la zona es de 177 pesos.
La colonia Roma fue otro de los lugares donde se reportaron problemas de desabasto de gasolina, de acuerdo con comentarios de usuario en redes sociales. Sin embargo, al solicitar el servicio desde punto de Pico de Tolima a la calle Aguascalientes, ubicada en dicha colonia, no presentó complicaciones: Uber calculó un tiempo de llegada de tres minutos y un costo de 118 pesos que no rebasó el promedio (144 pesos).
El Gobierno federal inició el 20 de diciembre la aplicación del plan contra el robo de combustibles. Entre las medidas de esta propuesta está la toma de instalaciones estratégicas de Pemex por parte del Ejército, entre ellas seis refinerías.
Además, para evitar el 'huachicoleo', la administración de López Obrador optó por transportar los combustibles a través de pipas en lugar de por ductos.
La decisión ha provocado retrasos en la distribución de los combustibles, principalmente en los estados de Hidalgo, Estado de México, Jalisco, Michoacán, Guanajuato y Querétaro.