¡Síguenos!Antes que todo, es importante que un especialista evalúe tus síntomas y comiences un tratamiento acorde. Por ejemplo, los síntomas comunes de la influenza son tos, fiebre, dolores y fatiga.
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Los síntomas de la gripe y el resfriado generalmente aparecen gradualmente e incluyen tos, estornudos, secreción nasal y dolor de garganta; los resfriados generalmente no causan fiebre, la gripe sí.
El periodo contagioso
De acuerdo con especialistas, el periodo contagioso de la influenza es el día del inicio de los síntomas y puede durar hasta cinco y siete días a partir de sentirse enfermo.
En el caso del resfriado y la gripe, el riesgo de contagio es desde uno o dos días antes de que inicien los síntomas y cinco días más, o hasta que los síntomas desaparezcan totalmente.
La gripe e influenza son contagiosos y las personas que los padecen pueden pegársela a otras personas que se encuentren a menos de dos metros de distancia, según el Centros de Control y Prevención de Enfermedades (CDC, por sus siglas en inglés).
Pero también es posible contraer el virus de la gripe y resfriado al tocar un objeto que lo tenga y después tocarse la nariz o la boca.
Un recordatorio más de lo importante que es lavarse las manos con frecuencia, más en periodos como éste, cuando todos a tu alrededor están enfermos.
Considerando lo anterior, si enfermas de resfriado o influenza lo mejor que puedes hacer es quedarte en tu casa una semana.
Y la ciencia lo respalda: los doctores dicen que el mejor tratamiento para la gripe, resfriado e influenza —además de las medicinas— es quedarte en casa, descansar, beber muchos líquidos, usar una botella de agua caliente para aliviar los dolores musculares, chupar pastillas para aliviar el dolor de garganta o usar un spray para la nariz congestionada.
Otras recomendaciones para evitar contagios
Si no vives solo o de plano no puedes faltar a la oficina, estas precauciones podrían evitar la propagación de las enfermedades:
- Lavarte las manos constantemente.
- Lavar los utensilios de cocina después de usarlos.
- Lavar la ropa de cama con frecuencia, no usar la misma dos noches seguidas.
- Evitar tocar perillas y puertas directamente.
- Usar cubrebocas.
- Usar desinfectante de manos con base de alcohol.
- Evitar tocarte la cara.
- Al estornudar o toser no te cubras la boca con las manos sino con la parte interior de tu brazo.