¡Síguenos!La Esclerosis Múltiple (EM) es una enfermedad autoinmune por la cual el sistema de defensas del cuerpo erróneamente lesiona partes propias en lugar de sólo atacar a los organismos externos como pueden ser virus o bacterias. En la EM se produce una agresión al sistema nervioso central (cerebro, médula y nervios ópticos), por parte de nuestro sistema inmunológico.
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Esta patología es el resultado del daño a la mielina, la capa que protege las fibras nerviosas del Sistema Nervioso Central. Si la mielina se destruye, la habilidad de los nervios para conducir impulsos eléctricos desde y hacia el cerebro se interrumpe, y este hecho produce la aparición de síntomas.
Esta enfermedad no tiene cura pero sí hay medicación para controlarla , atenuar o espaciar los brotes. De la mayoría de estos brotes, el paciente se recupera favorablemente. Se recomienda al paciente llevar una alimentación equilibrada y variada, reforzando la ingesta de fibra, vitamina D y calcio, realizar ejercicio físico moderadamente y evitar el sobrepeso, el alcohol y el cigarrillo.
Síntomas y diagnóstico
Si la enfermedad no se detecta a tiempo o se realiza un tratamiento equivocado, el avance de la esclerosis múltiple puede llevar a una discapacidad severa. De ahí la importancia de la atención temprana y de forma adecuada para poder prevenir la discapacidad en caso de que el paciente comience a padecer síntomas.
Entre sus síntomas se pueden enumerar visión doble, disminución de la visión, falta de fuerzas, alteraciones en la sensibilidad, falta de equilibrio, alteraciones esfinterianas, entre otras; aunque en los comienzos se suelen dar recaídas y remisiones, observándose síntomas varios y transitorios alternados con períodos de calma sintomática.
Avances en los tratamientos farmacológicos
Desde la primera descripción de la enfermedad realizada por Jean-Martin Charcot en 1868 no hubo durante muchos años un tratamiento considerado eficaz. Recién en 1993, 125 años después, se consiguieron avances en una medicación que disminuyó la frecuencia de las recaídas y con ello bajó la acumulación de discapacidad en el paciente.
A partir de entonces y hasta ahora hubo una verdadera explosión positiva de nuevos medicamentos llegando al momento actual con 12 drogas aprobadas en el mundo para el tratamiento inmunodulador de la EM en recaídas y remisiones. En este contexto, el horizonte futuro es alentador: hay al menos 250 protocolos de investigación en curso buscando nuevas alternativas farmacológicas para tratar esta afección.