El presidente Andrés Manuel López Obrador se refirió al anuncio de Elon Musk de pausar la construcción de la Gigafactory de Tesla en Monterrey, Nuevo León, que implicaría una inversión de 5 mil millones de dólares durante la conferencia matutina en Palacio Nacional.

López Obrador explicó que la decisión de Tesla se debe a la incertidumbre generada por las declaraciones de Donald Trump sobre la venta de autos producidos en México. Afirmó que su gobierno ha ofrecido todas las facilidades a Tesla y enfatizó que la culpa no recae en México.

También criticó la propuesta de Trump de promover la venta de autos fabricados cien por ciento en Estados Unidos, señalando que los altos costos de producción en ese país perjudicarían a los consumidores y trabajadores estadounidenses.

En este contexto, López Obrador leyó una carta enviada a Trump en la que destacó los contras de cerrar la frontera entre México y Estados Unidos, una medida que, según el mandatario mexicano, convocaría a una rebelión en ambos lados de la frontera debido a los graves daños económicos que causaría.

La carta mencionaba que tal decisión bloquearía el cruce diario de un millón de personas y 300 mil vehículos, incluidos 70 mil que transportan mercancías entre ambos países.

López Obrador consideró inviable la propuesta de fabricar todos los autos y autopartes en Estados Unidos, argumentando que los costos de producción son muy altos y que esta medida resultaría en un aumento de precios para los consumidores.

Destacó que la producción automotriz en México ha permitido aminorar estos costos, beneficiando a inversionistas, empresas, trabajadores y consumidores estadounidenses, y mencionó que un carro importado de México representa un ahorro de entre 10 mil y 15 mil dólares para el comprador estadounidense.

El presidente mexicano abogó por la importancia del Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC) para enfrentar la competencia económica y comercial de China. López Obrador afirmó que América del Norte debe consolidarse como una región independiente y no depender del abasto de mercancías de otros continentes.

La carta concluyó con un recordatorio amistoso sobre su mandato, enfatizando que su presidencia finaliza a finales de septiembre. En una posdata, López Obrador le pidió a Trump que no lo "mande a la chingada" antes de tiempo, reiterando su compromiso con la cooperación bilateral. Finalmente, expresó su solidaridad por el reciente atentado contra Trump, condenando la violencia en todas sus formas.