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Un joven que radicaba en el municipio de Zacapoaxtla se reencontró 21 años después con su madre salvadoreña en San Diego California, Estados Unidos, quien lo buscaba desde 1995, fecha en que el padre del menor lo sustrajo del seno familiar luego de una discusión de pareja. El progenitor, sin dar aviso, se trasladó con el menor, quien entonces contaba con 18 meses de edad, al mencionado municipio poblano, localizado en la sierra norte.
Fue así que luego de más de dos décadas de incertidumbre, la mujer identificada como María Mancia, por fin se reencontró con su hijo de nombre Steve Hernández Mancia, quien actualmente cursa la carrera de Derecho.
El pasado 9 de junio, el medio de comunicación ABC7.com, a través de la periodista Leticia Juárez, dio cuenta del emotivo reencuentro entre Steve y María, quien le dio la sorpresa de presentarle a otros cuatro hermanos más chicos.
Al entrevistar Leticia a María, ella le comentó: “Esta angustia que he llevado ha desaparecido ahora que tengo a mi hijo. Me pasé 21 años en busca de él sin saber nada”.
Mancia le mostró a la periodista su celular en el que aparece la foto de Steve, cuando tenía 18 meses de nacido, edad desde la que fue sustraído por su padre de nombre Valentín Hernández. “Siempre mantuve esta foto, era lo único que me quedaba de él”, agregó la emocionada mujer.
María reveló que en 1995, al regresar a su casa tras cumplir su jornada laboral, descubrió que Valentín, padre del menor, se había marchado con el niño y con todas las fotos de su hijo e incluso el acta de nacimiento.
A pesar de que denunció a su expareja, la Policía dio carpetazo al caso. Afortunadamente en 2012, el expediente fue reabierto por la Unidad de Investigación de Secuestro de Menores del Condado de San Bernardino, en San Diego California, EU. Incluso se ofreció una recompensa de alrededor de 750 mil dólares a quien proporcionara información sobre el paradero de Valentín Hernández.
Los investigadores obtuvieron información valiosa en el mes de febrero de este año, que daba cuenta de que Steve se encontraba viviendo en Puebla, México. Fue así como se pidió la colaboración de la Fiscalía General del Estado (FGE) de Puebla y se ubicó en Zacapoaxtla a Hernández Mancia, a quien se le trasladó al Instituto de Ciencias Forenses en la Fiscalía poblana, el pasado 9 de mayo, ahí una perito en materia de genética le explicó detalladamente la diligencia y procedió a la toma de muestra.
La prueba fue remitida al departamento de Justicia de California. Al realizar el análisis de la misma y compararla con la muestra que también se le practicó a María en aquel país, se obtuvo que el ADN de ambos era coincidente.
Los investigadores de California se comunicaron con Steve y con María para darles la buena noticia, misma que para ambos fue difícil “procesar”. Steve abandonó territorio mexicano hace dos semanas para reunirse con su madre en el vecino país.
De acuerdo al medio digital que dio la noticia del reencuentro, puntualizó que Steve piensa quedarse a vivir en Estados Unidos con su madre María, para obtener el título de abogado, carrera que estudiaba en México.