¡Síguenos!Tras dos semanas de confinamiento, el primer ministro francés, Jean Castex, anunció este jueves que las restricciones continuarán sin cambio alguno hasta el próximo día 1 de diciembre. Si bien “la evolución del número de nuevas infecciones se ha ralentizado en la última semana […] Sería irresponsable levantar o aligerar el dispositivo [de confinamiento] en estos momentos”, explicó el jefe del Gobierno.
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No es el momento de “relajar nuestros esfuerzos, sino de amplificarlos”, continúo Castex, haciendo especial hincapié en la tensión hospitalaria: Francia ha superado las 32.000 hospitalizaciones por covid-19, el nivel máximo registrado durante la primera ola de la epidemia. “En los últimos días, contamos una hospitalización cada 30 segundos y un ingreso en cuidados intensivos cada 3 minutos”, subrayó. Según los datos ofrecidos por el primer ministro, el 40% de los pacientes ingresados en las UCIS tendría menos de 65 años.
Mismas restricciones, más controles
En este contexto, el respeto del confinamiento se ha convertido en una verdadera preocupación para el Ejecutivo. “Doy las gracias a la inmensa mayoría los franceses que respetan las normas […] Pero constatamos un respecto insuficiente de estas reglas”, aseguró Castex. Un análisis respaldado por un sondeo publicado este mismo jueves por el Ifop: el 60% de los franceses habrían transgredido la normativa al menos una vez, es decir, un aumento de 27 puntos en comparación con el primer período de confinamiento, cuando solo el 33% de los ciudadanos reconocía haberse saltado las reglas. “Hago un llamamiento a la conciencia cívica para respetar las reglas”, lanzó el primer ministro, quien lejos de hacer la vista gorda anunció “un aumento de la movilización de las fuerzas del orden en París y en las grandes metrópolis”, para multiplicar los controles y evitar nuevos focos de contaminación.
El objetivo del Gobierno es claro: evitar al máximo el número de contagios y reducir la tensión hospitalaria para poder aligerar las restricciones a partir del próximo 1 de diciembre y permitir a los franceses pasar las fiestas navideñas en familia. Fechas que no será como “de costumbre […] No es razonable esperar organizar grandes fiestas con más de 15 personas”, avisó Castex. Esta primera etapa destinada a atenuar las reglas concernirá únicamente a los comercios; bares, restaurantes y gimnasios tendrán que seguir esperando para reabrir sus puertas.